Este es un artículo interesante de Mark Hopkins en Valley Crest. Habla sobre la conexión entre las plantaciones nativas, las condiciones de sequía y el Dust Bowl. Parece que la mayor parte de la acción debe ser tomada por los residentes urbanos.
En la década de 1930, la parte media de la nación experimentó uno de los peores desastres ecológicos en la historia de Estados Unidos. El Dust Bowl, como se denominó el período, fue el resultado de la destrucción de las plantaciones nativas, las malas prácticas agrícolas y un período prolongado de sequía. Mi mamá era una niña, en el centro de Oklahoma, durante este período. Recuerda a la familia colgando sábanas mojadas sobre las ventanas y puertas por la noche, para poder respirar. Cada mañana, las sábanas estaban completamente marrones debido al polvo que soplaba.
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